Esta es la primera entrada sobre calles y aceras de estas dos zonas. Toda las fotos fueron tomadas por el administrador de este blog (Fabio R.) durante el mes de Enero del año 2009, a diferentes horas del día, a menudo con ayuda de colaboradores y amigos.
Existen tres grandes características comunes que tienen estos espacios:
1) Obstaculización de aceras:
La obstaculización (a veces de manera grave, que imposibilita totalmente el paso) del flujo peatonal por aceras y calles. Por lo general por una combinación de las siguientes razones: mala disposición de objetos (como basura) que esté, literalmente, bloqueando el paso; la superficie irregular o destruida de las aceras, con agujeros y elevaciones difíciles de sortear; y con automóviles estacionados netamente en la acera, lo que, obviamente, es un obstáculo casi insorteable para la mayoría de las personas.
Cabe destacar, para los que no estén familiarizados con Caracas, que la estrategia mas comúnmente empleada por los citadinos para transitar por sus aceras es, nada mas y nada menos, que pasar por la calle. Evitarse todo el problema de sortear la basura, grietas y obstáculos, simplemente saliendo de la acera y caminando por la mera orilla de la calle.
En esta foto (arriba) se observa claramente el estado de la superficie física de la acera.
(Arriba) Un claro ejemplo de “total obstaculización” de la acera.
Nótese el pequeño espacio disponible para transitar, entre automóvil y bolsas de basura.
En la foto (arriba) se nota la costumbre de estacionar el vehículo de manera que obstaculice todo el paso peatonal. Por lo cual, el caminar por la calle, es la única solución.
Nótese (arriba) el pequeño muro, las bolsas de basura y, en el fondo, a la derecha de la foto, un automóvil ocupando todo el espacio de la acera.
En la foto (arriba) se ve otro automóvil bloqueando el paso de la estrecha acera, así como también un “obstáculo vegetal” que difícilmente está dispuesta en donde debería estar.
Cabe acotar que, si bien a algunos puede parecerles válida o viable la técnica de caminar por la orilla de la calle, o la de caminar sorteando los obstáculos, esto se muestra manifiestamente difícil (por no decir imposible) para personas incapacitadas, además de, en ocasiones, provocar problemas de tránsito vehicular y/o peatonal, por no decir accidentes; imagínese usted a varias personas intentando pasar por la misma estrecha acera obstaculizada, o lo que ocurre cuando varias personas caminan a orillas de la calle al tiempo que también lo hacen varios automóviles.
2) Disposición de la basura:
Esto está referido a la disposición de desechos materiales (orgánicos e inorgánicos, en Venezuela, o al menos en Caracas, no existen contenedores separados de estas dos categorías, pues el reciclaje es incipiente) en el espacio público. Aquí se notan tres grandes sub-categorías: a) aquellas bolsas de basura que están dispuestas a las afueras de las viviendas y comercios, con la razonada intención de que el aseo urbano las recoja y se las lleve; b) aquellos desechos dispersos en los espacios públicos por pura negligencia de los que la producen, en otras palabras, basura no depositada en los contenedores correspondientes (“littering”, en inglés); y finalmente c) esos desperdicios que, a pesar de haber sido depositados en los contenedores puestos para esa misma función, están dispersos por los alrededores por la incapacidad de dichos contenedores de almacenar la basura, es decir, aquella basura que cae fuera de los recipientes por estar estos “desbordados”.
Nótese (la dos fotos de arriba) que, a pesar de existir el contenedor de basura, existen desperdicios esparcidos, incluso en las plantas.
(Arriba) El desagüe de la orilla de la acera, obstaculizada por desechos que sobresalen de él.
Lamentablemente, la gran mayoría de las aceras de Caracas tienen, al menos, algunos desperdicios dispersos por aquí y por allá. De manera que escenas como esta (arriba) es de lo más común.
Las “islas” entre calles, son a menudo usadas como espacios para disponer la basura para la recolección del aseo urbano. El problema está en la muralla de bolsas de basura que a veces se forman, y que no permite el libre tránsito de peatones por las islas.
Si bien en las fotos (las dos de arriba) no son de espacios públicos propiamente dichos, debe de tomarse en consideración que la acumulación de desperdicios que se observan, son , mayormente generados por los transeúntes al pasar por allí (pues están justo al lado de aceras bastante transitadas), es decir, que lo usan como vertedero de basura mientras transitan por el espacio público (acera). En todo caso, muestra la cultura que tiene el caraqueño sobre “qué hacer” con la basura generada por ellos.
(Las dos fotos de arriba) A pesar de que están apiladas dentro de un recipiente de recolección del aseo urbano, muchos pequeños sobrantes se ven dispersos por los alrededores.
Obsérvese (arriba) la gran cantidad de desperdicios lanzados deliberadamente, en la pequeña jardinera.
Véase (arriba), al pie del poste de luz, la acumulación de botellas de cerveza.
(Las dos fotos de arriba) Basura a orillas de la acera.
La imagen aquí expuesta (arriba), es quizás una de las mas impactantes, y probable y tristemente, una de las más representativas de la combinación de problemas referidos a la basura: dispersión negligente de la basura, y superación de la capacidad de almacenamiento de recipientes.
Por increíble que parezca, esta situación (arriba) lleva varios días (sino semanas). Además, lamentablemente no es inusual en Venezuela.
Esta basura (arriba), incluida la que no esta en bolsas negras, es generada y dispuestas de esta manera por un supermercado. Tristemente, no supone ninguna diferencia con la situación de las demás viviendas; la mayoría de ellas (por no decir todas), disponen de su basura de esta misma manera.
(Arriba) Parece ser una costumbre bastante arraigada entre los habitantes de Caracas, la del disponer de la mayoría de los espacios públicos, como vertedero de basura. Al terminar de consumir los productos que adquieren, los transeúntes simplemente descartan los envases y la basura por ellos producida, allí donde más les parece apropiado (que precisamente no son los recipientes para desechos).
Sobre el asunto de la basura esparcida por negligencia parece haber poco que decir, salvo que la penalización legal real de tales acciones (“littering”), de la mano con la creación de conciencia, parecen ser las soluciones obvias, sin embargo, como pasa a menudo en cuestiones sociales, a veces las respuestas son un poco mas profundas; invito a la investigación.
Igualmente pasa con el problema de la limitada capacidad de almacenamiento de recipientes; estaría en orden poner nuevos, mejores, y mas grandes contenedores.
Pero para problemas como el de la disposición de bolsas de basura con intención de ser recogida por el aseo urbano, es un poco complicado. Es decir, si te toma en cuenta que ya de por si, las aceras, en su mayoría, son bastante estrechas, entonces se dificulta el disponer de recipientes voluminosos estandarizados con tapa que, a primera vista, pareciera ser la alternativa a tener las bolsas apiladas en los espacios públicos. ¿Quizás centros de tratamiento de desechos, en donde la gente lleve su propia basura, como en algunos lugares de Estados Unidos? la cuestión es un poco más complicada, sin embargo, creo firmemente que se puede dar solución, si tan sólo se le dedica un poco mas de atención al asunto.
Aguas estancadas y conclusiones en la parte 2… próximamente.
Muy bueno tu blog Fabio, te felicito, y este artículo en especial está excelente :)
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